martes, 6 de agosto de 2013

Un año de lucha para abrir el gremio



La AGD es una gremial con una rica tradición democrática y de lucha. Se funda a partir de la ruptura respecto de la burocracia de Ricci y poco a poco fue creciendo con nuevas camadas docentes. No obstante, la mayoría de los docentes de la UBA sigue sin afiliarse ni participar. Consideramos que las dificultades actuales para desplegar planes de lucha masivos, para conquistar nuestras reivindicaciones y para aumentar la participación en la AGD obedecen a situaciones de diverso tipo, dentro de las cuales se incluyen aspectos del funcionamiento gremial. Es en este marco que vemos la necesidad de ponerlos de manifiesto con el objetivo de contribuir al fortalecimiento de la AGD.
Desde hace un año Docentes por el cambio participa del Secretariado y de la Mesa Ejecutiva de AGD UBA como representación de minoría. Durante todo este tiempo hemos evitado hacer de la denuncia a la conducción nuestra política y sólo hicimos públicas declaraciones de ese tenor cuando debimos responder a acusaciones  graves de la Agrupación Naranja (PO).
Desde que Docentes por el cambio obtuvo el 38 % de los votos en las elecciones de 2012 la respuesta de la conducción ha sido blindar el gremio, imponer su condición de mayoría obstaculizando cualquier debate o instancia de participación de los docentes e insistir en el desconocimiento del estatuto. A continuación damos como ejemplos sólo algunos hechos dentro de un accionar cotidiano.
1)    Violación de la proporcionalidad de la representación y distribución anti estatutaria de las secretarías
El primer episodio se desarrolló apenas concluido el recuento de votos. La mayoría -como hizo desde la primera presentación de listas opositoras en 2006- desconoció el estatuto al reconocer a Docentes por el cambio solo dos secretarías en lugar de las tres que correspondían según el reparto proporcional. Pero no sólo se limitó a ello. En un hecho inédito, asignó a Docentes por el cambio las secretarías de DD.HH. y de Asuntos Académicos (las dos últimas) cuando correspondían las secretarías Gremial y de Hacienda. Incluso se nos ofreció negociar otras secretarías (que no incluyeran ni la Gremial ni la de Hacienda) pero sólo si aceptábamos firmar que nos correspondían dos y no tres, lo que obviamente rechazamos.
2)  Ausencia de debate en torno a los fondos para cursos de capacitación
Desde el mes de setiembre de 2012 reclamamos insistentemente que la conducción brindara un informe de lo actuado en relación a los cursos de capacitación y que se propiciara un espacio abierto a los docentes para discutir la política de capacitación, a su vez, propusimos la realización de una consulta o encuesta para relevar necesidades de formación de los docentes. Entendíamos que una selección transparente de los cursos y una discusión democrática sobre la política de capacitación eran centrales para diferenciarse de otros gremios que utilizan esos recursos de manera discrecional y clientelar. La conducción no sólo eludió sistemáticamente esas demandas sino que recién el 27 de marzo de 2013, y ante nuestra insistencia, improvisaron un informe plagado de generalidades y que ocultaba  la información requerida. Ese mismo día el Secretariado resolvió convocar una reunión abierta para el jueves 11 de abril a las 18 hs., que después de sucesivas suspensiones nunca se realizó. Al día de hoy:
-Desconocemos los criterios utilizados para seleccionar los cursos.
-Nunca se realizó consulta a los docentes ni reunión abierta alguna.
-Desconocemos la cantidad de dinero utilizada ni cuánto se le paga a los docentes.
-Nunca pudimos participar ni fuimos consultados o informados como minoría de ningún aspecto de la implementación de los cursos.
A esta altura resulta evidente que se ha buscado excluir a la minoría de cualquier control sobre el uso de los recursos y privilegiar un manejo discrecional e inconsulto de la asignación de los cursos.
3)  Desviación del mandato de Asamblea sobre el plan de lucha
En las asambleas del 4 y 17 de abril de 2013 se resolvió por unanimidad -y a partir del diagnóstico construido a partir de las diversas intervenciones- una estrategia para enfrentar el aumento salarial inferior a la inflación y exigir la reapertura de la negociación salarial. Compartiendo que nos encontramos en un escenario de desmovilización se decidió priorizar el trabajo en las facultades y articular la demanda salarial con los problemas específicos de la UBA: cesantías, caja complementaria, infraestructura y condiciones de trabajo, ad honorem, etc. A su vez, a partir de la propuesta de Docentes por el cambio,  se acordó la formulación colectiva y plural de los materiales de difusión del plan de lucha con el fin de reflejar la diversidad de miradas de los docentes que integramos el gremio. Sin embargo, no sólo los boletines de la AGD fueron redactados sobre la base de la línea partidaria de la agrupación mayoritaria sin contemplar otras miradas sino que en la jornada de protesta del 9 de mayo la conducción apostó a una carpa frente el Ministerio, en confluencia con otras asociaciones de base de CONADU Histórica y asociaciones disidentes de CONADU. Ello desplazó la actividad desde las unidades académicas hacia el acto central. Desde allí el eje de la acción de AGD se desplazó ostensiblemente a la interna de CONADU H. Todo ello sin que mediara otra Asamblea (lo cual se relaciona con el siguiente punto). 
4) Un juego peligroso
Aun dejando de lado la disputa pública sobre la actuación de los congresales de AGD UBA por la mayoría, que ya fue objeto de suficientes comunicados, lo actuado por la conducción de AGD en CONADUH exige una discusión profunda. La AGD UBA por decisión exclusiva de la Mesa Ejecutiva, donde la Agrupación Naranja (PO) impone su mayoría, está participando de encuentros con asociaciones de base opositoras a las conducciones de CONADU H y de CONADU. En el encuentro realizado en San Luis el 31 de mayo de 2013 se resolvió una jornada nacional de protesta, lo que supone una virtual paralelización de la CONADU H. Las declaraciones de este agrupamiento ad hoc asimilan sin matices a las direcciones de la CONADU Histórica y de la CONADU (esta última aceptó la última oferta salarial en un acto más de subordinación al gobierno que no muestran ni siquiera los sindicatos de la CGT oficial, que rechazaron el techo del 22% y acordaron uno nuevo de 24%). Desde Docentes por el cambio hemos expresado en la Mesa Ejecutiva que la participación en un espacio de esas características y la estrategia de paralelización de la CONADU H exigen una discusión en Asamblea. Estas razones sumadas a la ausencia de mecanismos que regulen la representación y la toma de decisiones en ese espacio nos lleva a rechazar el carácter vinculante de las decisiones allí tomadas.
Desde Docentes por el cambio adherimos a la coordinación con asociaciones de base y espacios sindicales anti burocráticos y combativos en el marco de una estrategia orientada a construir mayor unidad en el movimiento docente en lucha y por esa misma razón, rechazamos categóricamente cualquier estrategia divisionista que lo debilite aún más y especialmente que debilite a la CONADU H. Creemos que la AGD debería proponer medidas en común entre la CONADUH y esas asociaciones de base de la CONADU, sentando las bases para una mayor unidad sindical democrática.
5)   Funcionamiento irregular de Secretariado y de Mesa Ejecutiva
Durante el segundo semestre de 2012 (primer semestre con representación de Docentes por el cambio) se logró, no sin insistencia, que se fijaran un día y horario de reunión quincenal del Secretariado y una reunión mensual de Mesa Ejecutiva (máximo órgano de conducción del gremio que incluye Secretariado y Secretarios Generales de Comisiones Directivas). Durante 2013, sin embargo, no se establecieron día y horario fijos para secretariado a pesar de nuestro pedido reiterado de que circulara una grilla para posibilitar la participación de los siete miembros del secretariado. El resultado es que se ha convocado en distintos días y sin periodicidad. Esto significa que la conducción del gremio se ha reducido, salvo grandes discusiones, a las decisiones inconsultas de la mayoría y a reuniones irregulares de sus órganos de conducción, lo que anula en los hechos su carácter público.
Todas estas actitudes no son simplemente un menosprecio hacia los representantes de Docentes por el cambio sino también al 38% de docentes afiliados que nos votaron. De este modo, se configura un mecanismo informal de funcionamiento que obstaculiza la participación de muchos docentes en el sindicato, impide que se expresen otras voces y subordina nuestra herramienta gremial a una línea de intervención construida desde su conducción por fuera del diálogo y las instancias de construcción democráticas y plurales.
El desconocimiento y violación de los derechos laborales de los docentes y la arbitrariedad de la política desplegada por las autoridades de la UBA, sumadas a la insuficiencia presupuestaria provocan una gran cantidad de situaciones problemáticas que vulneran nuestras condiciones de trabajo. Es enorme el desafío que tenemos por delante. Desde Docentes por el cambio consideramos que para asumirlo, necesitamos fortalecer la AGD a través de la participación, la democracia interna y la apertura a la pluralidad de opiniones, por ello no dudamos en asumir la lucha frente a las autoridades de la UBA a través de una práctica sindical consecuente.

 Agosto de 2013